La población de Arrabalde está situado al noroeste de la Península Ibérica, en la provincia de Zamora. En su término municipal se halla el Castro de las Labradas, sobre uno de los altos de la Sierra de Carpurias, dominando la vega del río Eria. Este lugar forma parte de la Ruta Arqueológica por los Valles de Zamora (Vidriales, Órbigo y Ería).
El Castro de Las Labradas es el mayor poblado fortificado astur en la provincia de Zamora. Estuvo ocupado desde la Edad de Bronce, pero su momento álgido se corresponde con el final de la Edad del Hierro y la romanización de estas tierras. Dada su estratégica ubicación es probable que este lugar fuera refugio de los astures de las poblaciones colindantes ante la pujante presencia de las legiones romanas. Éstas controlaron los movimientos de los astures desde el cercano campamento de Petavonium (Rosinos de Vidriales), propiciando en época imperial el abandono de la ocupación del castro.
El recinto fortificado del castro contaba un perímetro de cerca de dos kilómetros y medio de longitud y alcanzaba una extensión de 23 Ha. Son excepcionales sus estructuras defensivas, con dos recintos amurallados yuxtapuestos. En la visita al castro podemos contemplar una de sus puertas de acceso, reconstruida y flanqueada por dos torreones macizos de planta cuadrada a sus lados. El interior del castro cuenta con varios puntos señalizados -depósitos de agua y estanques, los restos de una ermita del siglo XVII, otros tramos de la muralla- que nos permiten recorrer una ruta senderista de dos kilómetros de distancia. Otro elemento destacable del castro es la existencia en una de sus laderas de un campo de "piedras hincadas", rocas afiladas colocadas en vertical para impedir el asalto de fuerzas de caballería o de infantería.
En el edificio de las antiguas escuelas se encuentra habilitado el Aula arqueológica del Castro de las Labradas, un espacio que, a través de paneles explicativos y reproducciones de piezas arqueológicas, nos permitirá conocer los modos de vida de los primitivos astures que habitaron el castro a finales del siglo I a.C.
En el Museo de Zamora se exhiben los denominados Tesoros de Arrabalde, dos conjuntos de piezas de joyería de oro y plata descubiertos en el castro de Arrabalde en los años ochenta del siglo pasado. Están compuestos por más cincuenta piezas de oro y plata, principalmente de uso personal como brazaletes, colgantes, anillos o peines. Se cree que fueron escondidos por sus propietarios en algún momento de las guerras astur-cántabras (29-19 a.C.) que enfrentó a sus pobladores con las tropas invasoras.
Viator Imperi
No hay comentarios:
Publicar un comentario