jueves, 19 de mayo de 2022

Necrópolis dolménica de Corominas, en Estepona


En el año 2007, en Estepona, en parque San Isidro Labrador, más conocido como Los Pedregales, se inauguró el Centro de Interpretación de Corominas para el estudio de la necrópolis de dólmenes que se encuentra en este paraje. Este centro fue construido después de que en 2001 se encontrara, gracias a unos trabajos de la autopista, el yacimiento prehistórico.

Formada por varias estructuras revestidas y cubiertas por losas de piedras, con restos de decenas de individuos y depósitos funerarios, y con unos 5.000 años de antigüedad -ahí es nada-, esta es la primera agrupación en necrópolis dolménica conocida en la Costa del Sol. De hecho, este yacimiento de Corominas es el más meridional de las necrópolis megalíticas localizadas en Andalucía y una de las más importantes de nuestro patrimonio histórico cultural.

En el interior del centro se ha reconstruido la topografía del yacimiento, incluyendo los cinco dólmenes en su posición original, de los que se exhumaron vasijas de cerámica, útiles de piedra, puntas de flecha, hachas y adornos personales, sobresaliendo las cuentas de collar, realizadas algunas sobre piedras semipreciosas, entre otros objetos cuyos antiguos dueños no echarán de menos.

Málaga Hoy 

lunes, 16 de mayo de 2022

Necrópolis de Trayamar de Algarrobo


Esta es una de las zonas funerarias con la que contaban los fenicios entre las desembocaduras de los ríos Vélez y Algarrobo.

Construido siguiendo patrones arquitectónicos orientales, data del siglo VIl antes de Cristo y sirvió para alojar los restos incinerados de los miembros de la élite local, posiblemente adinerados comerciantes del vecino poblamiento de Morro de Mezquitilla. Por ello es el complejo de tumbas paleopúnicas más importante del Mediterráneo occidental.

El cementerio está compuesto por una serie de tumbas en cámaras subterráneas levantadas con sillares. Las joyas y demás piezas que conformaban el ajuar de las tumbas se encuentran en el Museo Arqueológico de Málaga, junto a una reconstrucción a escala de cómo debió ser la tumba.

Málaga Hoy 

sábado, 14 de mayo de 2022

Muralla de Toscanos, en Torre del Mar


La Muralla de Toscanos pertenece a una colonia fenicia que tuvo sus orígenes a principios del siglo VIIl antes de Cristo.

Ubicado dentro de los yacimientos fenicios de la desembocadura del río Vélez, catalogados como Bien de Interés Cultural desde 2008, el yacimiento fenicio de Toscanos de Torre del Mar es uno de los que conforman el conjunto de Torre de Manganeta, en Vélez-Málaga.

Entre los edificios excavados destaca uno de cuidada factura ubicado en el centro, de tres naves y dos alturas, que pudo cumplir funciones administrativas e incluso de templo, y que estuvo destinado a almacén de mercancías.

Por desgracia, últimamente no vive su mejor momento.

Málaga Hoy 

lunes, 9 de mayo de 2022

Complejo de Coimbra del Barranco Ancho - Jumilla


El complejo ibérico de Coimbra del Barranco Ancho, cuya época corresponde al ibérico (siglos IV-II a. C.) que incluye un poblado, un santuario y tres necrópolis se localizada en el término municipal de Jumilla (Región de Murcia, España) en la falda del cerro de "El Maestre", estribación septentrional de la Sierra de Santa Ana, a unos 780 m sobre el nivel del mar, a una distancia de 4,5 km de la localidad.

El Poblado está delimitado por tramos de muralla y escarpes naturales, que facilitarían su defensa. su perímetro aproximado es de 3000 metros. Pueden identificarse restos de habitaciones, parcialmente excavadas.

En el extremo Este se localiza la necrópolis del Poblado. Otras necrópolis son "La Senda", así denominada al situarse en la senda que une el Poblado con el cercado Monasterio de Santa Ana y la del "Barranco", situada por fuera de la muralla. Las tumbas se fechan entre 400 y 350 a. C. La Necrópolis del Poblado incluye la tumbas más relevantes de la aristocracia local, y presenta varios niveles superpuestos perdurando los enterramientos hasta el siglo II a. C.

Del Santuario no quedan más que algunos materiales consistentes en terracotas. Los materiales obtenidos en diferentes excavaciones y prospecciones se encuentran depositados en el Museo "Jerónimo Molina" de Jumilla, entre los que destacan el cipo funerario y otros fragmentos escultóricos atribuidos a la tumba 70 y los restos del monumento funerario del "El Prado (reconstrucción hipotética según Pedro Lillo Carpio) además de ajuares de tumbas que incluyen urnas cinerarias, con cerámica bicroma, cerámica ibérica y de importación, cerámicas tipo brasero, similares a las de Amarejo, objetos de adorno, armas y otros. El cipo funerario formaría parte de un pilar-estela junto a otros fragmentos escultóricos encontrados en la necrópolis del Poblado, entre los que se encuentran los fragmentos de un toro, naceta de gola decorada con guerreros tumbados, un fragmento de gola con decoración pseudovegetal y un fragmento de sillar. El cipo está decorado en tres de sus caras con relieve de jinetes y en una por una escena de despedida. García Cano, que ha propuesto una reconstrucción, lo data en el siglo IV a. C. y lo relaciona con el monumento funerario del Corral de Saus.

Las excavaciones se inician por Jerónimo Molina a mediados de los 50 y continúan a partir de 1977 bajo la dirección de la Doctora Ana María Muñoz Amilibia, hasta la incorporación en 1985 del director actual José Miguel García Cano.

Wikipedia 

viernes, 6 de mayo de 2022

Poblado ibero de El Puig d’Alcoi


El yacimiento arqueológico de El Puig de Alcoy se localiza entre las partidas de El Regadiu y La Canal, en terrenos próximos a la urbanización de El Estepar, por donde habitualmente se accede a esta elevación de 888 m de altitud desde la que se obtienen unas magníficas vistas.

El Puig de Alcoy es un buen ejemplo de poblado fortificado en altura de época ibérica, entre los siglos VII y IV aC. Al amparo de una abrupta topografía se construyó un pueblo que ocupaba la práctica totalidad de la colina y que estuvo protegido por un excepcional torreón.

El poblado tenía una extensión próxima a 1,5 ha donde vivirían unas trescientas personas. Tuvo un aspecto compacto y un trazado urbanístico regular con grupos de casas cruzados por calles rectilíneas. Los rellanos naturales estaban ocupados por bloques de viviendas formando pequeños barrios y entre ellos se encontrarían espacios abiertos, donde se desarrollaban trabajos cotidianos, como el procesamiento de los frutos del campo, o el trabajo de la lana.

El yacimiento arqueológico de El Puig, conocido desde la década de 1910, ha sido objeto de excavaciones a lo largo de más de cien años. Junto con La Serreta (Alcoy, Cocentaina, Penáguila), es un referente que ha contribuido valiosamente al conocimiento de la cultura ibérica en las tierras valencianas.

Las casas ibéricas se construyeron con un zócalo de piedra y un alzado de barro con adobes o tapial. Las cubiertas estaban hechas con estructuras de vigas de madera y cubiertas por vegetación compactada con barro en su cara exterior.

Los muros dibujaban departamentos cuadrados de reducidas dimensiones que componían un módulo básico con el que configurar las casas por adición y yuxtaposición. Había casas sencillas con dos habitaciones y otras más complejas, como la que ahora presentamos con cuatro habitaciones. En cada vivienda habitaría una familia nuclear formada por los padres y los hijos.

La cámara principal dispone de un hogar central, donde se depositaban brasas para calentar la estancia y cocinar; aquí se debía reunir la familia por la noche para convivir, comer y descansar. A la habitación principal se le añaden otras estancias para otros usos. Las grandes vasijas para contener los alimentos y el agua nos indica la localización de la despensa. En otras habitaciones se realizarían actividades como el tejido, con telares verticales, y se descansaría por la noche.

Las diferencias en tamaño, estructura y los objetos nos hablan de las actividades domésticas y también de las diferencias de riqueza y composición de las familia

Alcoyturismo