jueves, 25 de abril de 2019

Castro de la Cerca - Aguilar de Anguita

El Castro de La Cerca en Aguilar de Anguita. Data de los siglos V-IV a.e.c. Probablemente se trata de una ciudad celtibérica reutilizada posteriormente por tropas romanas.

Tarraconensis

Castro de Buruntza - Andoain

Descubierto y dirigida su excavación por C. Olaetxea.
El monte Burunza (Buruntza en vascuence) es una pequeña elevación de unos 441 msnm, situada 12 km al sur de San Sebastián, en el País Vasco (España).
Lo rodean las localidades de Andoain (al sur), Lasarte-Oria (al norte) y Urnieta (al este), y se desarrolla desde el nordeste (alto y ermita de Azkorte) hacia el sudoeste, extremo rematado por una gran cantera (en las proximidades del barrio de Buruntza, en Andoain). El monte se levanta frente al Adarra (817 m, al sudeste) y próximo al Andatza (562 m, al oeste). Por el oeste el Burunza es bordeado por el río Oria. En su cima se levanta una gran cruz.

Accesos
El acceso principal parte del collado y ermita de Azkorte (210 m), en Urnieta. Desde aquí se cruza una valla para ir ganando altura por un sendero que avanza en dirección SW hasta alcanzar la cima. El camino está bien señalizado.

Historia
Casi en la misma cima del monte Burunza quedan restos de un poblado o castro de la Edad del Hierro. Fue descubierto en 1989 y excavado entre 1992 y 1996 por C. Olaetxea. Ocupa una superficie de 0,7 ha.

Wikipedia

Castro de Arrola o Marueleza - Vizcaya

Entre Navárniz, Arrazua y Mendata
Está considerado como el mayor poblado de la Edad del Hierro de Vizcaya y el más importante del Cantábrico oriental, es uno de los mejor conservados del País Vasco. Contaba con unas importantes defensas en las que destaca una gruesa muralla de tierra y piedras. Fue uno de los principales centros desde donde se artículó la vida de Urdaibai desde la Edad del Hierro hasta la entrada de los romanos, cuando se abandonan los castro y se ubican a orillas de los ríos y del mar.

(Escapada rural)

martes, 23 de abril de 2019

Castillejo de Fuentesauco - Soria

SITUACIÓN Y EMPLAZAMIENTO
Está situado en un cerro de escasa elevación con diferentes aterrazamientos, junto a la carretera N-122, de Soria a Zaragoza y del arroyo Molino, que desciende de la Sierra de Ontalvilla, suministrando el agua a la fuente del pueblo, situado a un kilómetro y al otro lado de la carretera.

En este poblado, no castreño, de la Edad del Hierro se han documentado tres momentos sucesivos: uno inicial de los siglos VI-VI a.C., formado por cabañas circulares; una segunda ocupación de los siglos V-IV a.C. de viviendas rectangulares y finalmente un nivel más reciente con cerámicas a torno, del siglo III a.C., como lo indican las fechas de C-14, entre 350 y 280 a.C.

Celtiberia Soria

Yacimiento de El Llano de la Horca - Santorcaz

El yacimiento de El Llano de la Horca se encuentra en Santorcaz, Madrid. Se trata de un oppidum, es decir, de una ciudad fortificada y en alto cuya posición permitía el control del territorio circundante. Se eleva unos 900 metros por encima del nivel del mar y ocupa aproximadamente 10 hectáreas. Aunque no se conserva la muralla, los restos de unos alineamientos de piedra hacen creer que posible existiera.
Uno de los rasgos más interesantes de este yacimiento es la variedad de estructuras domésticas que se han descubierto, lo que permite establecer la función de cada edificio, la planificación urbana y la ocupación del territorio, dándonos una idea lo más cercana posible a lo que pudo ser la vida cotidiana en la ciudad.
Los posibles motivos por los que se elegiría esta ubicación para la ciudad parecen ser dos: la existencia de un manantial al pie del cerro que siempre tiene agua y también la abundancia de tierras fértiles muy adecuadas especialmente para el cultivo del cereal. Además, se encontraba en medio de una ruta comercial que permitía una economía de intercambio más allá de la mera subsistencia. Se cree, además, que el Llano de la Horca pudo ser usado por las tropas romanas como cuartel de invierno.
Organización urbana
El yacimiento de El Llano de la Horca tiene una estructura urbana representativa de las ciudades carpetanas. Se basa en un trazado reticular con manzanas cerradas de casas adosadas por su pared trasera, lo que permitía el reforzamiento de las viviendas. En la zona más elevada del oppidum se abría una plaza, un espacio central en el que confluían las calles. Algunas de estas calles llegan a tener 5 metros de ancho y aún conservan las huellas de los carros.
Las casas de El Llano de la Horca tenían forma trapezoidal o rectangular y estaban divididas por tres espacios: uno que haría función de cocina y taller, otro con el hogar donde se llevaría a cabo la vida cotidiana y otro que funcionaría a modo de almacén. Además, habría que sumar el porche exterior donde seguramente se producía la mayor parte de la vida familiar para aprovechar la luz natural, escasa en el interior, y la interacción con los demás.
Los muros se construían con piedra y arcilla y los tejados, con madera y ramas. Las viviendas tenían una extensión de entre 70 y 90 m2. La separación interna se conseguía mediante tablas de madera o un entramado vegetal con barro. La ocupación pertenecía a un solo grupo familiar que solía incluir a tres generaciones: abuelos, padres e hijos.

La economía en el Llano de la Horca
Sabemos que en este yacimiento carpetano se desarrolló una agricultura evolucionada y muy productiva que se basaba principalmente en el cultivo del cereal (trigo y cebada) y las leguminosas, todo ello favorecido por la ocupación de nuevas tierras. Además, también habría árboles frutales de los que cosechar y también se recolectarían frutos del bosque y bellotas.
En cuanto a la ganadería, destacan los bóvidos, los ovicápridos y los cerdos, éstos últimos también como generadores de abono para los cultivos. Por el análisis de la edad de los animales sacrificados se deduce que la mayoría de los ejemplares se sacrificaban con una edad avanzada, por lo que se favorecería la reproducción de los animales y la obtención de recursos como leche y lana además de la carne.
Se han hallado restos de jabalí, ciervo, zorro y liebre pero tan sólo testimoniales y también de perro y caballo, especies no consumidas pero sí domesticadas. Este aparente desinterés en la caza podría venir de la escasez de piezas o de la ausencia de necesidad debido al ganado doméstico.
Los restos del Llano de la Horca permiten afirmar que existía un comercio muy dinámico en la ciudad seguramente debido a su situación geográfica. Un 10% de las monedas aparecidas pertenecen a cecas romanas, íberas y celtibéricas y se han encontrado piezas de vajillas campanienses, íberas, celtíberas y vettonas; de hecho, el Llano de la Horca es el yacimiento carpetano más representativo en cuanto a cerámicas de barniz negro de la Península Itálica.

La religión en el Llano de la Horca
No hay evidencias aún de la necrópolis del Llano de la Horca, que quizá estaría a una distancia de entre 200 y 800 metros del poblado. El sistema de enterramiento seguramente sería la cremación. El cadáver y sus pertenencias se quemarían en una pira de madera y las cenizas se depositarían directamente en un hoyo excavado en el suelo o se meterían previamente en un recipiente.
En general no se conocen bien las necrópolis carpetanas aunque comparten algunos rasgos. Los cementerios no tienen una delimitación espacial aunque las tumbas sí pueden señalizarse con lápidas. Dedicar un espacio a los muertos supone también una forma de pertenencia del territorio.
No se han encontrado tumbas con armas en los ajuares, que suelen pertenecer a los guerreros, por lo que se puede deducir que la actividad bélica de la zona era escasa. Esto no quiere decir que no existiera una diferenciación social dentro de una sociedad tan igualitaria, ya que eran los cabeza de familia los que tenían más estatus.

Céltica Hispana

Torreón celtíbero de Anento


Conocido como el torreón de San Cristóbal, pone de manifiesto la ocupación celtibera de estas tierras. En lo alto del valle del Aguallueve, a la margen izquierda de este, se conservan varias hiladas de un potente torreón celtíbero construido con bloques megalíticos. Probablemente date de fechas sobre los 200 a. C.
Los Celtíberos vivían en distintos tipos de asentamientos, que las fuentes antiguas denominan poleis o urbes, civitates, vici y castella.
Las poleis o urbes eran del tipo de la ciudad-estado antigua; con un núcleo urbano más o menos desarrollado y un entorno agrario dependiente de él.
Las civitates eran organizaciones políticas indígenas autónomas que podían tener o no una configuración urbana.
Los vici y castella eran los asentamientos menores en los que la mayoría de la población vivía dispersa, en aldeas o poblados o entorno a torres de defensa.
Anento pudo dar alojamiento a un asentamiento vici y castella, como demuestra este torreón.


Castro de Basagain - Anoeta

Los arqueólogos vascos han descubierto en Basagain un castro de la Edad del Hierro situado en Anoeta. Una pieza de piedra "arenisca triásica" con distintas líneas grabadas que parecen representar una calle central, con casas anexas alineadas a ambos lados, podría ser el primer plano urbano de la prehistoria ibérica.
Ésta es la principal hipótesis con la que trabajan los arqueólogos Xabier Peñalver y Eloisa Uribarri, tras 25 años de trabajos en este yacimiento, en el que encontraron esta piedra "excepcional”. Han presentado la piedra hoy, viernes, en la Diputación de Gipuzkoa en un acto al que han asistido el diputado de Cultura, Denis Itxaso, y la directora de este departamento foral, María José Telleria.
Según ha explicado Peñalver, la pieza, datada hace unos 2.300 años, tiene unas dimensiones de 36,5cm de largo, 29,5 cm de ancho y un grosor de entre 3,5 y 4 cm. Además, ha añadido que tras "numerosos trabajos de comparación", plantea la posibilidad de que las líneas grabadas en su superficie representen "una planta de una parte del poblado de Basagain".
El grabado definiría "un eje o calle central, transversalmente, y, a ambos lados, lo que pudieran ser viviendas claramente diferenciadas entre sí".
Peñalver ha precisado que este "trazado", en caso de corresponder como se piensa a un "plano urbano", con casas alineadas a ambos lados de una calle central, "guarda similitud" con las estructuras urbanas halladas en otros yacimientos de la misma época, como el poblado alavés de La Hoya en Laguardia o el navarro de Alto de la Cruz de Cortes, entre otros.
Además de esta piedra, las excavaciones realizadas en Basagain en los últimos años han permitido descubrir parte de la muralla que rodeaba el poblado completamente.

Euskal Irrati Telebista

domingo, 21 de abril de 2019

Castro Monte Cueto - Cantabria

El castro Monte Cueto es un poblado cántabro situado en el monte El Cueto, dentro del término municipal de Castro Urdiales. Conserva trozos de muralla y es datable en la Edad del Hierro, e incluso podría coincidir con la ocupación romana. Su situación se ve afectada por antenas de radiodifusión, torres elétrictricas y plantaciones modernas de eucaliptos, a pesar de estar protegido por la declaración genérica del decreto de 22 de abril de 1949 y la ley 16/1985 sobre el patrimonio histórico español.
El castro es un poblado protegido por tres murallas concéntricas de bloques trabados a hueso. En él se han encontrado una estatuilla religiosa indígena de Neptuno, fechada en época romana, de 12 cm., de bronce (denominada el Neptuno cántabro), dos monedas romanas de los siglos I y IV y restos cerámicos en sus proximidades del Bronce final y principios del Hierro.
Plinio el Viejo ya mencionaba en su Historia Natural, al describir la costa norte de España, una población que llamaba Portus Amanus o Portus Samanum, y que en teoría pertenecía a un grupo indígena cántabro llamado los sámanos. Dice también que sobre este puerto se estableció Flaviobriga, posteriormente Castro Urdiales.

Wikipedia 

miércoles, 17 de abril de 2019

Toletum - Toledo

Parva urbs, sed bene munita (Pequeña ciudad, pero bien amurallada). Anales de Tito Livio.


La ciudad es reflejada por primera vez en las fuentes históricas por Plinio el Viejo en Naturalis Historia (III) como Caput Celtiberiae. La llegada de los romanos a la zona fue motivada por los enfrentamientos con los cartagineses. La ciudad carpetana podría tener ya una clara jerarquización pues Tito Livio cuenta en sus Anales la captura de un rey llamado Hilerno, lo que puede ser prueba de la existencia de una monarquía o al menos de un fuerte caudillo magnificado por Tito Livio.
En la Edad de Bronce final, Toledo se había convertido en un gran asentamiento carpetano, continuando su desarrollo en la Edad del Hierro hasta llegar a ser un oppidum, plaza fuerte, con un extenso territorio en su poder. Arqueológicamente, se conoce muy mal el poblado carpetano, aunque la dispersión de sus restos muestran su gran entidad. Por fuentes romanas se conoce que estaba amurallado y ocupaba una superficie estimada de unas 40 hectáreas.[9]​ No se sabe más, aunque se puede extrapolar lo obtenido en otros yacimientos carpetanos de la misma época.

Wikipedia 

Yacimiento de El Cerrón - Illescas

El yacimiento de “El Cerrón” se halla ubicado a 3,5 Km al SO de la población de Illescas (Toledo), en la comarca de La Sagra, posee forma ovalada, con dos estrangulaciones en los laterales Norte y Sur y una superficie aproximada de media Ha. Presenta una rampa de acceso en Talud y una terraza defensiva de 8 m. de desnivel total en la zona más alta. Por sus proximidades discurre el arroyo de Las Dos Villas. 
Se han realizado tres campañas de excavación correspondientes a los años 1977, 1979 y 1980, dirigidas por Luis Balmaseda y Santiago Valiente. El área excavada es reducida, pero ha permitido constatar que el yacimiento corresponde a un poblado de la II Edad del Hierro cuya cronología se extiende entre finales del s. V y el s. II a.C. Presenta tres etapas de ocupación marcadas por niveles de incendio. 
La zona más interesante excavada por ahora corresponde a una santuario con dos fases sucesivas de ocupación separadas por un estrato de destrucción o incendio. El santuario más antiguo se ha fechado hacia el 330 a.C y el de la segunda fase hacia el 210 a.C. En ambas las plantas son rectangulares, con hogares centrales de forma rectangular y posibles compartimentaciones interiores. 
Hacia el exterior los muros no conservan ningún tipo de recubrimiento o enlucido, mientras que en el interior algunos muros conservan capas de estuco o cal con los que se revocaron y pintaron sus paredes, pudiéndose apreciar en algunas zonas un color rojizo. De igual modo el suelo también está cubierto con capas de estuco o cal. 
La fase más antigua ofrecía agujeros abiertos directamente en el suelo destinados a sostener una estructura de madera, ya que se halló una grapa junto a una tabla de madera del posible techo o cubierta del edificio. El material cerámico de esta fase se compone de recipientes tanto a mano como a torno, con algunas piezas importadas, las típicas cerámicas jaspeadas, platitos con finas bandas pintadas, una gran tinaja, un fragmento de pondus y un anillo de bronce. 
En la segunda fase, cerraba el recinto por el lado Oeste un muro de adobe con zócalo de piedra al que se adosaba un banco corrido o altar construido con adobes de cerca de 1,50 m. de longitud, 0,50 m. de altura y 0,70 de profundidad, de superficie muy alisada y compacta. Decorando esta estructura se encontraba en su frente Este un relieve moldeado en pasta de adobe que representa dos carros guiados por sendos aurigas y arrastrados por caballos, les sigue un grifo, y entre medias de los carros, aparece un personaje en pié, tal vez femenino, que levanta la mano en señal de saludo o despedida. En el hogar de esta fase aparecieron cerámicas pintadas con bandas y círculos concéntricos o semicírculos y otras jaspeadas típicas de la zona. En el suelo había tres pequeñas losetas de piedra, formando una caja de 18/20 cm de diámetro destinada a contener alguna viga o soporte. Junto a esta estructura aperció un hoyo relleno de huesos de cabra y oveja junto con restos cerámicos pintados con motivos geométricos así como un fragmento de cerámica ática. Hay que destacar el hallazgo en superficie de una incompleta figurita masculina en bronce que posiblemente represente a un jinete porque presenta las piernas abiertas.

Celtiberia Net

Cerro De Castro San Cristóbal - Cuevas de Soria

CÓMO LLEGAR?
Desde la localidad de Cuevas de Soria sale una pista dirección norte de la que parte un ramal en dirección este que da acceso al castro que se identifica fácilmente por la situación de la Ermita.

TRABAJOS DE INVESTIGACIÓN
E. Saavedra (1863) recoge la noticia de autores anteriores, como Lópe de Morales y Loperraez, que hablan genéricamente de restos antiguos; pero será Taracena (1941), en su Carta Arqueológica de la Provincia de Soria, quien concrete que se trata de un castro de la Edad del Hierro, incluyéndolo entre los castros de lo que definió como “Cultura castreña Soriana”. Fernández Miranda (1972) lo incluyó en su estudio sobre los castros sorianos, dando a conocer los restos de cerámica depositados en el Museo Numantino; recogiéndolo también en su estudio sobre los castros Bachiller Gil (1985). Pero la referencia más completa sobre este yacimiento se incluye en el trabajo de Pascual Díez sobre la Carta Arqueológica de la Zona Centro de la provincia de Soria(1991).

SITUACIÓN Y EMPLAZAMIENTO
Esta situado en el cerro de Castro, debajo de la ermita de Los Santos Mártires o San Cristobal, a una altura de 1060m sobre el nivel del mar y a unos 20m sobre el valle del río Izana, que discurre al Oeste. Este castro junto al de los Castillejos del Cubo de la Solana serían los situados más al sur del conjunto de los castros de la Serranía Norte soriana.

SISTEMA DEFENSIVO
Está defendido artificialmente por su lado sur y este, que es el de más fácil acceso, por una potente muralla, que tiene una longitud de 93m y una altura de 2,50m. En su lado oeste está defendido por un cortado natural.

En el espacio interior que ocupa una superficie de 5000 m2, se recogieron cerámicas a mano típica de los castros de la Edad del Hierro y también escasos restos de cerámica pintada y algo de cerámica sigillata romana, correspondientes a una ocupación más reciente.
En la ventana de la sacristía de la ermita hay embutida una inscripción funeraria romana dedicada a Valeria Titulla, de…años de edad, a Valeria Ata, de 12 años, …a su madre y a su hermana cuidó de hacerla.

CONTACTOS Y HORARIO
El acceso es libre y el yacimiento está sin señalizar

Celtíbera Soria

sábado, 13 de abril de 2019

Castro de Castillejo de la Sierra - Soria

TRABAJOS DE INVESTIGACIÓN
Realizo excavaciones y dio a conocer este yacimiento Blas Taracena, en 1929, e hicieron aportaciones posteriormente P. Harbison (1968), M. Fernandez Miranda (1972) y Fernando Romero Carnicero (1991).

SITUACIÓN
Se sitúa al noroeste del pueblo, sobre la cumbre de un alto cabezo circular, a 1.400 m de altitud, en la vertiente meridional de la Sierra de Alba. Se trata de un lugar con una imponente posición estratégica, desde el que se domina toda la llanada numantina hasta el Pico Frentes (Sierra de Cabrejas) y el acceso al puerto de Oncala, una de los pasos naturales entre el Alto Duero y la cuenca del Ebro, a través de la zona riojana.

EMPLAZAMIENTO
Es uno de los castros más significativos de la provincia, al ser probablemente el más completo, en cuanto a los elementos del sistema defensivo. Ocupa un cabezo circular, en el extremo de un espigón que desciende hacia el sur desde la Sierra de la Calva, línea de cumbres que se une al próximo puerto de Oncala. Su planta es aproximadamente circular, de 130 metros de diámetro y unos 13.000 metros cuadrados de superficie, delimitado por el este y el oeste por profundos barrancos, presentando una potente muralla que defiende tres de sus lados, siendo innecesaria en el cuadrante sudeste, que presenta una pronunciada pendiente.

SISTEMA DEFENSIVO
Su sistema defensivo consta de una muralla de mampostería a canto seco, con una anchura de entre 5 y 6,30 m pudiendo haber alcanzado una altura de 4,50 m, de los que se conservan únicamente 2 m al exterior y 1,50 m al interior; delante de ésta hay un foso (de donde se saco la piedra para construir la muralla) y por delante, en una anchura de 20 a 27 m, una franja de piedras hincadas que pueden alcanzar hasta 60 m de altura para desestabilizar al atacante.

CONTACTOS Y HORARIO
El camino está señalizado, tiene cartel explicativo y el acceso es libre.

Celtiberia Soria

Castro de Hinojosa de la Sierra - Soria

¿COMO LLEGAR?
Se puede llegar por la carretera que va de Garray a El Royo o por la carretera que va desde Soria a este pueblo. Ambas carreteras se unen poco antes del pueblo de Hinojosa, para bordear la laguna de este nombre.
Viniendo por la carretera desde Garray, casi en la confluencia con la otra carretera, se coge un camino a mano derecha que accede al castro, pero a unos 500 m, una barrera corta el acceso, por lo que el último kilómetro hasta el yacimiento ha de realizarse andando.

TRABAJOS DE INVESTIGACIÓN
Los primeros trabajos fueron realizados por Blas Taracena (1929), habiendo realizado posteriormente distintas aportaciones A.H.A. Hogg (1957), P. Harbison (1968), M. Fernández Miranda (1972), recogido todo ello por F. Romero Carnicero en su tesis doctoral (1991).

SITUACIÓN Y EMPLAZAMIENTO
Este poblado fortificado, situado sobre un afloramiento rocoso, se localiza en una de las estribaciones de la Sierra de Carcaña.

SISTEMA DEFENSIVO
El castro de planta oval, tiene una superficie de 5.800 metros cuadrados, que está rodeada completamente por una muralla, cuyo derrumbamiento mide 14 m de espesor y 2,50 de altura. Delante de la muralla, en el cuadrante suroeste, a partir de unos 10 m, se dispone la típica barrera defensiva de piedras hincadas. Siglo VI-IV a.C.

CONTACTOS Y HORARIO
El camino está señalizado, tiene cartel explicativo y el acceso es libre.


Celtiberia Soria

Castro del Pico del Hacha - Cantabria

El castro del Pico del Hacha es un poblado castreño cántabro localizado en las inmediaciones de Seña (Limpias), cerca de Laredo, e identificado como tal por el Servicio de Patrimonio (I. Castanedo Tapia) en junio de 2000. El lugar está ocupado por una serie de antenas que han provocado la destrucción de gran parte del yacimiento, instaladas en 1999.
Se trata de un recinto amurallado que ronda las 2 hectáreas de superficie y data de la Edad del Hierro. En él se han encontrado fragmentos de molinos de mano barquiformes concebidos en piedra arenisca y otras herramientas protohistóricas.

Wikipedia 

domingo, 7 de abril de 2019

Cerro de la Gavia - Madrid

Asentamiento humano ubicado en terrenos pertenecientes al Distrito de Villa de Vallecas, situado en un promontorio de difícil acceso en forma de triángulo y rodeado por las líneas del AVE de Sevilla y de Barcelona y la M-45. Hoy se encuentra en el entorno del Parque Lineal del Manzanares.
En 1919 los arqueólogos José Pérez de Barradas y Paul Vernert descubrieron en la zona trozos de cerámica, instrumentos humanos tallados en piedra y construcciones que dataron en la etapa media o final del Neolítico, entre los años 5000 a 2500 a.C.
Pero hasta 1999 no comenzaron las excavaciones del poblado por el equipo del arqueólogo Jorge Morín, cuando se tuvo que reformar el trazado de la línea de Alta Velocidad a Barcelona para sortear el yacimiento.
El cerro fue ocupado en el Paleolítico, al final de la época de la Antigüedad Clásica, e incluso durante la Guerra Civil Española, pero la época de mayor ocupación ininterrumpida corresponde a la II Edad del Hierro, entre los siglos IV a.C. y I de nuestra era.

Madripedia

Castro de la Dehesa de la Oliva - Patones

En Venturada del Campo, salida 50 de le carretera N-l, se toma la N-320 que, hacia el este, se dirige e Torrelaguna. Desde Torrelaguna la M-102 conduce a Patones de Abajo. Una vez pasado Patones, a 3,5 Km. sale a mano izquierda la carretera M-134 que se dirige a El Alazar. Tras bordear el yacimiento arqueológico, un camino forestal que sale a ta derecha conduce a la zona habilitada para la visita pública.
La Dehesa de la Oliva se asienta sobre un cerro enmarcado al norte por relieves pertenecientes al Sistema Central, al sur por el rio Jarama, al este por el rio Lozoya. y al oeste por el arroyo Valdenteles. La vegetación es mediterránea de tendencia continental, dominada por un sotobosque arbustivo de garrigas y retamas.
Los testimonios arqueológicos en la Dehesa de la Oliva dan cuenta de una ocupación dilatada a lo largo de la Historia. Ha sido habitado o visitado de modo recurrente por grupos humanos pertenecientes a culturas y sociedades muy dispares: en la Cueva del Reguerillo se encuentran, por un lado, las manifestaciones artísticas más antiguas dejadas en el territorio madrileño, obra de cazadores del Paleolítico Superior; por otro materiales dejados por agricultores neolíticos o los primeros forjadores, calcoliticos y de la Edad del Bronce.
En la superficie del Cerro los pobladores prerromanos, no se sabe con certeza si cárpetenos, vacceos o celtiberos, vieron transformados su modo de vida y costumbres con la conquista romana, y convertido el castro en una ciudad planificada dotada de calles, infraestructuras hidráulicas y edificios públicos. Tras su abandono como lugar residencial la cumbre del yacimiento fue reutilizada como necrópolis entre los siglos V y VI d.C. Abandonada en época islámica, la Dehesa vuelve a ocuparse tras la conquista cristiana. De esta época el vestigio más importante es la iglesia románico-mudejar de la Virgen de la Oliva, del siglo XIII, probablemente relacionada con un despoblado situado en les inmediaciones.

Patones.Net

Castro de Bergida - León

Bergida fue una ciudad amurallada o castro cántabro, junto a la que se desarrolló la primera de las principales batallas de las guerras cántabras (año 26 a. C., según la cronología de E. Martino entre las tropas del Imperio romano y las tribus indígenas cántabras.

Localización
De acuerdo con la teoría de Eutimio Martino el castro de Bergida lo podríamos localizar en una vega llamada Valberga, en la zona de Riaño (actual León) que por aquella época estaría en territorio cántabro, cercano al límite con el territorio astur. En su obra Roma Contra Cántabros y Astures Eutimio Martino asegura que el topónimo Valberga procede del latino Valle de Bérgida, y que está documentado en los siglos XVI, XVII y XVIII, así como en textos de la Alta y la Baja Edad Media.
Otra hipotética localización para este castro es la región de El Bierzo, identificándolo con Castro Ventosa. Esta hipótesis sacaría la acción de la Cantabria prerromana y la llevaría a zona astur.
Además Joaquín González Echegaray da como alternativa la llanada de Mave, junto al Pisuerga, en Palencia (dentro de la Cantabria histórica).
También el Castro de Monte Bernorio, en el municipio de Pomar de Valdivia (Palencia) ha sido identificado con Bergida, basándose en su situación y en la localización próxima de los restos de un campamento romano de grandes dimensiones, así como la aparición de numerosos proyectiles de artillería romana en el mismo.

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jueves, 4 de abril de 2019

Yacimiento del Ecce Homo - Alcalá de Henares

El yacimiento del Ecce Homo o de la Vera Cruz es una zona arqueológica que se encuentra en el cerro homónimo, uno de los cerros de Alcalá, dentro del municipio español de Alcalá de Henares (Comunidad de Madrid), donde se encuentran restos de un castro carpetano de la primera Edad del Hierro, probablemente entre los siglos VII y VI a. C., e incluso hasta el V a. C.  en la segunda Edad del Hierro, y que se construyó sobre un asentamiento del final de la Edad del Bronce.​, o anterior.​
En el yacimiento del Ecce Homo se encontró una estructura arquitectónica, probablemente una cabaña de madera utilizada como vivienda (ya que solo tenía 32 m2 de superficie, además de cerámicas, restos de animales, industria lítica, etc. Gran parte de ellos en hoyos utilizados como basureros (llamados «hoyas»).La cabaña se ha convertido en referente de vivienda de la Edad del Hierro I de Madrid y se han realizado múltiples reconstrucciones basadas en las características de los más de 60 agujeros donde se clavaban los respectivos troncos.
Tiene un altitud de 835,5 metros.

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miércoles, 3 de abril de 2019

Castro de Población de Suso

Respecto a su hallazgo poco se sabe. Se cree que se produjo a mediados del siglo XX, pero nadie ha determinado la autoría real de su descubrimiento. Es por aquel entonces cuando comienza a ser referenciado por diversos autores como por ejemplo Joaquín González Echegaray (1966:108). El único estudio del yacimiento que ha llegado hasta nuestros días es obra de Miguel Ángel Fraile.
En el castro de La Población de Suso estamos ante el típico sistema de terrazas, del cual tenemos varios ejemplos en Cantabria. Como se puede apreciar en la imagen, dos terrazas circundan casi por completo su cima superior de unos 100x75 metros aproximadamente. Inmediatamente después, vemos otro aterrazamiento de unos 180 metros donde el terreno gana mayor pendiente hasta casi llevar al río Izarilla. Llama la atención la potencia de estas estructuras, las cuales alcanzan una altura media de entre 2 y 3 metros en casi todo el recinto y una anchura de entre 2 y 6 metros dependiendo del sector.
Una tercera terraza de menor altura (poco más de un metro) arranca desde Sur hacia el Este, pegada a la pared de la colina. En su flanco más accesible se puede diferenciar el inicio de un foso que se encuentra colmatado casí en su totalidad a excepción del Suroeste, donde se ha podido medir una anchura de casí dos metros. Respecto al fondo del mismo no se han podido obtener ningún tipo de aproximaciones. Curiosamente, con la tierra sacada del mismo, se completó la defensa del enclave construyéndose un contrafoso. Este conserva en la actualidad una anchura de 4 metros por 2 metros de alto, con un perfil a modo de talud. Se ha llegado a interpretar que el contrafoso pudiese estar reforzado por una estructura a modo de empalizada o barrera.

Cronología
La tipología del yacimiento, aun sin existir materiales que puedan reafirmarlo, lleva a pensar que posiblemente estemos ante un recinto de la Edad del Hierro. Tanto los símiles encontrados en nuestra región como otras características del mismo llevan a pensar en esta adscripción sin poder profundizar en una datación más exacta.

Regio Cantabrorum

Castro de El Castellar - Arévalo de la Sierra

Situado al Sudeste del pueblo, entre Arévalo de la Sierra y Ventosa de la Sierra, se encuentra el cerro de El Castellar también conocido como El Castillo. Fue dado a conocer y excavado en 1929 por Blas Taracena y se ha fechado el poblado en los siglos IV-II a.C. De planta oval, y con una superficie de unos 18.000 metros cuadrados, es el mayor de todos los estudiados en la provincia.
El castro estaba rodeado por una muralla de la que se conservan sus cimientos, de 1,50 metros de grosor, hecha a canto seco y reforzada a dos metros al exterior por un terraplén revestido de piedra seca, de 80 cm de grosor, colocada a tizón. Las habitaciones estaban adosadas a la muralla y dispuestas en forma radial y más al interior del poblado se descubrieron algunas otras habitaciones más, de plantas también irregulares o retangulares.

Guía de Soria