lunes, 30 de agosto de 2021

Yacimiento de Ategua


Ategua es un yacimiento arqueológico situado en el término municipal de Córdoba (España) que fue declarado Monumento Nacional en 1982 y Bien de Interés Cultural como Zona Arqueológica en 2004. Su delimitación actual comprende 205 hectáreas. Su gestión se realiza a través de la Red de Enclaves Culturales de Andalucía (RECA).

Actualmente se encuentra cerrado al público.

Situado a unos 20 kilómetros al sureste de Córdoba, junto al río Guadajoz y dominando un antiguo camino que comunica Córdoba con la zona de Granada, Ategua constituye uno de los yacimientos arqueológicos más destacados de la provincia de Córdoba. Aunque su notoriedad historiográfica deriva, en primera instancia, del destacado papel que jugó en la última fase de la guerra civil entre cesarianos y pompeyanos (el denominado Bellum hispaniense), culminada con la toma de Corduba y con la definitiva victoria de César en la célebre batalla de Munda (45 a.C.), las excavaciones arqueológicas realizadas en los años sesenta y ochenta del siglo pasado, bajo la dirección de los arqueólogos A. Blanco Freijeiro y M. Martín Bueno, pusieron de relieve una dilatadísima historia en el yacimiento.

En el estado actual de la investigación arqueológica, el poblamiento de Ategua se iniciaría en la Edad del Bronce, si bien determinados hallazgos apuntarían a una ocupación anterior ya de la Edad del Cobre, en el tercer milenio a.C. En el siglo VIII a.C., Ategua ya constituía un importante asentamiento tartésico fortificado. La célebre Estela de Ategua, hallada en el cercano Cortijo de Teba y conservada en el Museo Arqueológico Provincial de Córdoba, sería testimonio de la importancia del oppidum, localizado en el extremo sur del territorio de Corduba.

Del oppidum ibero-romano se han conservado imponentes fortificaciones, especialmente en el sector nororiental de la acrópolis. Sin duda, fueron éstas las defensas que debió forzar César para hacerse con las reservas de trigo que los pompeyanos habían almacenado en la ciudad, y que resultaron fundamentales para abastecer a sus legiones hasta la victoria final en Munda, ya en la cercana campiña sevillana.

La ocupación de Ategua continuó durante la etapa imperial, sin que haya podido determinarse su estatuto jurídico. De esta etapa se han excavado varias casas que disponían de cisternas para el abastecimiento de agua. Igualmente se ha documentado parte de un posible edificio público.

Ya en la etapa medieval, destaca un recinto fortificado de la segunda mitad del siglo XII, que aprovecha las defensas ibero-romanas en el lado este, en tanto que en los flancos norte, oeste y sur se levanta una nueva muralla con zócalo de sillería y alzado de tapial, reforzada con diez torres cuadrangualres. Esta fortaleza debe ponerse en relación con los esfuerzos del nuevo poder almohade por garantizar el control militar de las principales vías de comunicación de al-Andalus.

Finalmente, tras la conquista castellana de la zona, en los años cuarenta del siglo XIII, se procedió al refuerzo de las puertas almohades mediante una torre octogonal y un baluarte dispuesto en el extremo nororiental, destinado a controlar las comunicaciones entre Córdoba y Granada.

En el siglo XIV se dispuso, en el espacio extramuros entre dos torres del sector suroeste, un mercado dispuesto en torno a una pequeña plaza rectangular pavimentada con lajas de piedra. Poco después, el asentamiento fue abandono, convirtiéndose Ategua en un despoblado junto al Cortijo de Teba la Vieja.

domingo, 29 de agosto de 2021

Menhires de Bernardos


Un equipo de arqueólogos ha encontrado en la localidad de Bernardos, en Segovia (centro), un monumento megalítico compuesto por grandes menhires dispuestos por el hombre en forma de recintos hace unos 6.000 años, un hallazgo que sus autores han definido como “el Stonehenge de Castilla y León”, la región en la que se encuentra.

Así se ha referido a él en declaraciones a Efe el director de las excavaciones, Raúl Martín, en relación al famoso crómlech levantado entre finales del Neolítico y principios de la Edad del Bronce que se puede visitar en Inglaterra.

En este caso se trata del pago de Lobones-Cantos Blancos, una estructura compuesta por grandes bloques de cuarzo blanco dispuestos de forma geométrica.

Uno de los mayores misterios a los que se enfrentan ahora los especialistas es descubrir para qué servía el enclave: “Desde un observatorio astronómico, lugares de culto, una necrópolis... No son yacimientos prolíficos en materiales, no aportan grandes restos arqueológicos: Aquí vienen, visitan, celebran o lo que sea y no dejan huella”, explica Martín.

Sí han encontrado en el lugar algunos materiales como piedras talladas que se cree que servían para tensar fibras a la hora de hilar y otras piezas curiosas como puntas de flecha creadas como símbolos.

El pago de Lobones-Cantos Blancos está localizado en el término municipal de Bernardos, un pueblo a unos 115 kilómetros al noroeste de Madrid, donde en 2018 se produjo otro gran hallazgo arqueológico, el Dolmen de Santa Inés, una tumba colectiva de la misma época que el crómlech dado a conocer hoy.

Los arqueólogos imaginaban que las comunidades de primeros agricultores y ganaderos en la Península habían dejado dólmenes en Segovia como huella de esos primeros asentamientos sedentarios, pero no fue hasta 2018 cuando lograron confirmar sus sospechas.

“Cuando estás en el territorio, tienes el tiempo necesario para pensar en otras cosas, para reunirte y agregarte en zonas muy concretas del territorio y construir la primera arquitectura de la humanidad, muy anterior a las pirámides de Egipto”, relata el arqueólogo, en referencia a estos monumentos funerarios levantados hace 6.000 años.

A raíz de una campaña que comenzó hace tres años, se encontraron al menos seis dólmenes en el término de Bernardos, uno de ellos el de Santa Inés, del que se sabe –y se puede vislumbrar en la actualidad- que tenía una cámara funeraria heptagonal, a la que se accedía por un corredor de dieciséis metros de longitud.

El enclave está “monumentalizado” por sus autores, pues el pequeño montículo sobre el que se yergue es totalmente artificial, hecho de piedra y tierra y, además, se encuentra “señalizado” con llamativas piedras de cuarzo blancas.

“¿Cómo demuestras al resto de comunidades del entorno que tú te agregas aquí, que tú explotas estos pastizales, que tú cultivas esta tierra? Poniendo la tumba de tus antepasados. Y cuanto más grande sea, mejor”, explica Martín.

El siguiente paso será encontrar los restos de quienes allí fueron sepultados, pero los expertos ya intuyen que no se trata de cualquier persona, pues entre otras cosas se han hallado restos de motivos hechos con variscita, un mineral muy exclusivo en esa época.

Agencia Efe

sábado, 28 de agosto de 2021

Hornos púnicos y fenicios (San Fernando)


Este conjunto arqueológico fue descubierto en 1987, cuando el Grupo Municipal de Arqueología de La Isla descubrió estos restos de hornos alfareros de origen fenicio y cartago-púnico. A día de hoy se encuentran expuestos en la Plaza de los hornos púnicos y fenicios, situada al noroeste de San Fernando.

Estos dos importantes talleres alfareros asociados a la ciudad de Gadir, datados entre los siglos VI al I a.C, se dedicaban a la fabricación de ánforas y otros recipientes destinados al transporte de conservas de  pescado, así como objetos de uso cotidiano y cerámicas protocampanienses.


miércoles, 25 de agosto de 2021

Cueva del Tesoro - Rincon de la Victoria


En el municipio de Rincón de la Victoria de la provincia de Málaga se encuentra la conocida como Cueva del Tesoro. Concretamente, la cueva se ubica en una zona llamada El Cantal. Como dato curioso, los cantales son pequeños acantilados que se formaron en época jurásica. Su importancia reside en que se trata de la única cueva de origen marino que se existe en Europa. Habría otras dos en el mundo pero situadas en Asia y América, respectivamente.

Esta cueva se configura como un testigo eterno de gran cantidad de momentos históricos. Por ella han pasado los hombres del Paleolítico, de la primera Edad del Bronce, así como los fenicios, los romanos y los árabes. Con respecto a estos últimos, se dice que habrían dejado escondido un tesoro en la cueva, aunque todavía nadie lo ha encontrado...

El Español 

lunes, 23 de agosto de 2021

Castiel - Luarca


Tipo de yacimiento:
Castro costero.

Se sitúa en una península cercana al lugar de El Chano. El recinto presenta forma subrectangular (23 áreas) y las defensas, situadas en la zona sur, se componen de cuatro fosos paralelos. 

No hay noticias sobre el hallazgo de materiales arqueológicos romanos.

De Brigantium a Oiasso 

domingo, 22 de agosto de 2021

Yacimiento carpetano de Miralrío - Rivas Vaciamadrid


Unos de los restos arqueológicos más importantes que pueden encontrarse dentro de la superficie del Parque Regional del Sureste son los pertenecientes al pueblo carpetano. Algunos de ellos pueden verse en el Centro de Interpretación Arqueológico de Titulcia pero otros, como el yacimiento carpetano de Miralrío en Rivas Vaciamadrid, puede verse in situ, visitándolo, ya que se encuentra dentro del Plan de Yacimientos Visitables de la Comunidad de Madrid.

Inaugurado en 2009, fue descubierto en 1996 mientras se desarrollaban obras para la urbanización del municipio. Los trabajos arqueológicos desarrollados en el yacimiento permitieron descubrir dos asentamientos diferentes. Uno de ellos, el más antiguo y de menor importancia, de la Edad de Bronce (en torno a 1.500-1.000 años a.C.), corresponde a tres fosas excavadas que serían usadas para almacenar alimentos.

La parte más importante del yacimiento corresponde a una vivienda carpetana datada con una antigüedad de entre 2.500 y 2.200 años (siglos IV y II a.C.). Los trabajos arqueológicos pertenecen a un poblado de la Segunda Edad de Hierro y es uno de los pocos vestigios del pueblo carpetano en la Comunidad de Madrid. El resto que ha quedado de aquella edificación es el zócalo de piedras sobre el que se levantaban los muros de adobe sobre los que se construía un techo de vegetación con arcilla y tierra.

El recinto cuenta también con una reconstrucción de la casa la cual contaba con dos zonas bien diferenciadas: una destinada a vivienda y otra a almacenaje. Durante la visita a esta instalación pueden verse las dos estancias de la casa, las fosas empleadas como almacenes y las herramientas relacionadas con las labores (molienda, cestería, textil) además de un vídeo que se proyecta sobre el pueblo carpetano.

¿Por qué decidió instalarse este grupo carpetano en esta zona? Pues debido a su situación estratégica ya que, al igual que en la actualidad, se encontraba próximo a los valles de los ríos Manzanares y Jarama lo que permitía un acceso fácil a los recursos que estos les brindaban y la posibilidad del desarrollo de la ganadería y la agricultura. Además, al estar ubicado a cierta altura, les permitía controlar visualmente gran parte de la superficie de alrededor.

Centrocampillo 

viernes, 20 de agosto de 2021

Dólmen de las Arnillas - Gredilla de Sedano


El Dolmen de Las Arnillas es un sepulcro de tipo corredor con cámara circular, protegido por un túmulo y se cree que la parte superior estaba cerrada con madera o ramaje ya que no existe la menor huella de un cierre monolítico plano.  El túmulo que rodea la cámara no es una simple acumulación de escombros, si no que tiene una enterramiento meditada y completa estructura dedicada a proteger la construcción megalítica.

Fue levantado en el periodo neolítico, siendo fechado en unos 4.575 años y usado hasta 1.000 años después. 

En su interior se han hallado los restos de casi 50 individuos, así como un conjunto de 13 calaveras que podrían estar relacionadas con un culto al cráneo habitual durante este periodo. Como curiosidad, quedan excluidos de forma sistemática de este tipo de enterramientos a los niños, mientras que la representación de las mujeres es dos tercios inferior a la de los varones. También se han encontrados diferentes ofrendas que se cree que son de carácter individual de cada individuo.

El entorno donde se encuentra es bastante curioso, ya durante la subida por el camino se pueden apreciar numerosos montones de piedras como los que podemos ver en los antiguos castros por ejemplo y muchos restos de muros de piedra. La extensión de estos restos es muy grande y parece un gran asentamiento. Todo esto a ojos de un simple aficionado al campo porque no soy capaz de interpretar esos restos.

jueves, 19 de agosto de 2021

Dólmen de la Dama Negra - Valle de Sedano


El dolmen mide 17 metros de diámetro

"En un punto de confluencia de tres valles al norte de Las Arnillas, en el antiguo camino de Gredilla de Sedano a Poza, se encuentra el megalito conocido como el dolmen de la Nava Negra" nos explican

Consta de formas geológicas muy especiales.

"En las proximidades hay una fuente con laguna, varios pasos naturales y una fértil nava. Abandonado a su suerte tras la excavación, merecería una conservación adecuada" señalan.

Los monolitos se encuentran en la zona del Valle de Sedano, una población de la provincia de Burgos con tan solo 421 habitantes, en sus 264 kilómetros cuadrados, con una densidad bastante baja.

Es una zona que contiene uno de los mayores conjuntos de megalitos y dolmenes de Europa, que se erigieron hace más de 5.000 años.

De hecho, desde el año 2017 el municipio se incluyó en el Geoparque de Las Loras. Aun así, muchos de estos megalitos carecen de conservación, acondicionamiento o reconstrucción.



domingo, 15 de agosto de 2021

Castro De la Peña Samano


Tipo de yacimiento:
castro costero.

El castro de la Peña de Sámano constituye un recinto amurallado de época prerromana, Noticias recientes informan acerca del hallazgo al pie de este castro, situado algunos kilómetros aguas arriba del río Sámano, de fragmentos de TS, cerámica común, objetos metálicos y- monedas. Se indica asimismo que en Sus alrededores se encuentran varias cuevas . con materiales romanos, aunque no se especifica su posición y características. J. M. Solana afirma que se trata de un asentamiento de la Segunda Edad del Hierro.

De Brigantium a Oiasso 

viernes, 13 de agosto de 2021

Yacimiento arqueológico Gil de Olid - Baeza


El yacimiento arqueológico Gil de Olid se localiza en la terraza de un meandro del río Guadalquivir, próximo al núcleo de Puente del Obispo, en el extremo oeste del término municipal de Baeza (Provincia de Jaén, España). Presenta un área de poblado y su necrópolis. Las prospecciones también documentaron la presencia de una villa.

Para el poblado se ha establecido una larga cronología detectada en seis períodos: Cobre Final - Bronce Antiguo, Protoibérico, Ibérico Antiguo, Ibérico Pleno, Romano Republicano y Romano Altoimperial, habiendo afectado el último profundamente a las anteriores. El poblado, un «oppidum» en época ibérica, estuvo fortificado a lo largo de todas sus fases, lo cual sostiene la idea de su origen como punto estratégico de control. En cuanto a la necrópolis, sólo ha sido localizada parcialmente la de época ibérica con una superposición de hasta cinco fases.

El poblado - El poblado presenta una larga ocupación, una primera del Cobre Final-Bronce Antiguo y una segunda que abarca desde el período protoibérico hasta la época altoimperial, desde el siglo VII a. C. hasta el siglo I d. C. De la primera fase se localizó una posible fortificación y varios niveles de habitación, mientras que la siguiente fase de ocupación, Protoibérica e Ibérica, queda representada mediante diversas construcciones de muros de tapial y zócalo de piedra, junto a un amplio repertorio de material cerámico. Este asentamiento continuó sin interrupciones hasta el período altoimperial, que es la fase mejor documentada, en la que destaca un área de viviendas a las que se asocian materiales cerámicos de paredes finas. También de gran importancia es un pavimento enlosado de grandes dimensiones que se asienta sobre una fuerte cimentación y delimitado por sillares de piedra. Éste es el último período detectado, abandonándose el asentamiento de forma inmediata. 

La necrópolis - La necrópolis se documentó en una intervención arqueológica en la década de los 80, apareciendo un total de 29 enterramientos, con una cronología que abarca desde el siglo VI al IV a. C. Predominan las fosas, simples o delimitadas mediante un murete de tapial o un zócalo de piedra. Estas tumbas se pueden agrupar en dos tipos. El primero de ellos se caracteriza porque la cremación se realiza en un espacio diferente y alejado del lugar de depósito, las cenizas se depositan en una urna y los materiales hallados mantienen cierta estandarización. En cuanto al segundo grupo, la fosa de cremación es de mayores dimensiones y se encuentra cubierta por un túmulo de tierra, practicándose la cremación en la misma fosa y depositándose los restos, sin urna, en un extremo. En ambos grupos se constató la ausencia de importaciones cerámicas.

Por último, se registran tres tumbas complejas o de cámara y otra de pozo, únicas estructuras en la que se documentaron importaciones cerámicas, que denotan una mayor complejidad estructural reflejo de diferenciación social.

Actualmente no se observa huella visible de la necrópolis pero sí del asentamiento, que cuenta con una secuencia estratigráfica muy potente que permitirá seguir aportando información sobre dichos períodos.

Fuentes - Este artículo es una obra derivada de la disposición relativa al proceso de declaración o incoación de un bien cultural o natural publicada en el BOE n.º 288 el 30 de noviembre de 2004 (texto ), texto que está libre de restricciones conocidas en virtud del derecho de autor de conformidad con lo dispuesto en el artículo 13 de la Ley de Propiedad Intelectual española.

LinkFang

miércoles, 11 de agosto de 2021

Yacimiento de Lugarico Viejo - Jauro



El yacimiento arqueológico de Lugarico Viejo, bien de interés cultural, se sitúa en la margen derecha del río Antas, cerca de la barriada de Jauro. Es un poblado fortificado de la Edad del Bronce que albergaba un conjunto de cabañas y enterramientos. 

Aunque su altitud no es elevada (212 m sobre el nivel del mar), su particular orografía y su relación con el entorno lo convierte en un lugar de indudable valor estratégico. 

En el exterior se han descubierto áreas de enterramiento, siempre coincidentes con los patrones de la Edad del Bronce del sureste peninsular.

Guía Repsol 

lunes, 9 de agosto de 2021

Yacimiento de la Serreta - Alcoy


El yacimiento arqueológico de La Serreta cuya época corresponde al ibérico antiguo y pleno y Romano, está situado en el término municipal de Alcoy (Provincia de Alicante, España).

Constituye un doble yacimiento, un poblado y un santuario. En 1917 fue descubierto el yacimiento, excavado por Visedo y declarado Monumento histórico-artístico perteneciente al Tesoro Artístico Nacional mediante decreto de 3 de junio de 1931. En la década de los años 1950 fue nuevamente excavado por Visedo y en los 1960 por M. Tarradell.

Los principales materiales están depositados en el Museo arqueológico Camilo Vicedo, que lleva el nombre del principal excavador del yacimiento. De aquí proceden seis plomos escritos en alfabeto greco-ibérico.

El yacimiento también ha proporcionado interesantes terracotas y cerámicas ibéricas, y de importación (griegas, púnicas, campanienses).

Se pueden observar restos de habitación, de planta cuadrangular, ordenados en largas filas. En el extremo occidental se localizan los restos del santuario, situado por Visedo en la porción más alta, actualmente señalada por un vértice geodésico, en cuyas inmediaciones se encontraron numerosos exvotos ibéricos en terracota. Llobregat describe restos de un edificio situado a 100 m., que podría corresponder al santuario de época romana.

Desde la zona del Santuario se puede observar la cumbre de la Sierra de Aixorta, que señala la salida del sol en los equinoccios, lo que para algunos astrónomos podría tener alguna significación (ver referencias).

En 1987 fue descubierta la necrópolis, que ha sido sistemáticamente excavada con el descubrimiento de 80 sepulturas, principalmente del s. IV aC. Los ajuares son de gran variedad y riqueza. Es de destacar la falcata de la tumba 53, con una preciosa empuñadura.

La totalidad de la ladera de la solana está cubierta de restos de edificaciones que se adaptan a los niveles de la montaña. No existen grandes restos monumentales, pero el entorno es evocador y las vistas magníficas.

domingo, 8 de agosto de 2021

Yacimiento de Les Raboses - Albalat dels Tarongers



El yacimiento de Les Raboses se encuentra en la montaña con el mismo nombre, situada en el término municipal de Albalat dels Tarongers (Bajo Palancia). Dicho yacimiento está encuadrado cronológicamente en la Edad del Bronce.

El yacimiento se da a conocer gracias a los trabajos de prospección llevados a cabo, en la década de 1940, por Andrés Monzó Nogués. Los materiales encontrados en estas prospecciones se encuentran actualmente en el S.I.P. de Valencia. Habrá que esperar a 1987-89, para que Eva Ripollés Adelantado, prospectara primero y después excavara en Les Raboses.

El Camp de Morvedre, alberga el yacimiento de Les Raboses. Su situación en altura es característica de la Edad del Bronce. Su entorno es montañoso y además encuadra la cuenca del río Palancia, que ha servido de eje de comunicaciones entre el interior y la costa desde tiempos remotos. Está delimitado por el macizo del Garbí al oeste y por los montes de Sant Esperit al este. Sus litologías están formadas por materiales calizos y por areniscas rojas (que son dominantes). La morfología de la cima en la que se encuentra es típica de la zona, con una vertiente cortada a pico (ladera sur-este), mientras que la vertiente vertiente opuesta tiene una inflexión suave en dirección al río (ladera norte y oeste). La cima es alargada, y el yacimiento está muy próximo al Barranco de Segart, que supone un paso natural entre el Valle del Turia y el del Palancia.

Geomorfológicamente pertenece al dominio estructural del Sistema Ibérico. El paisaje se caracteriza por un relieve abrupto, con alturas inferiores a 600 m.s.n.m., por lo que corresponde a un entorno de media montaña. La transición de este medio a las cercanas llanuras litorales, es realizada a través de unos breves piedemontes. El río Palancia es el auténtico eje estructural de la región. Su régimen pluvial es irregular, con grandes oscilaciones entre los meses de verano e invierno.

Las características orográficas dan lugar a microclimas diferenciados: termomediterráneo para las llanuras, mesomediterráneo para las umbrías y montañas, con más precipitaciones. Durante el Subboreal la humedad fue superior a la que hay en la actualidad, por lo que las especies características de un piso termomediterráneo/mesomediterráneo (Quercus faginea, Pinus sylvestris, Quercus suber), crecen a menor altitud debido a ello.

El inicio de la ocupación del yacimiento de Les Raboses se situaría en algún momento del Bronce Antiguo y Medio, y se puede asegurar que no alcanzaría el Bronce Final. El único yacimiento de la zona que continuaría en el Bronce Final es el del Pic dels Corbs (Sagunto). Este hecho, similar al de la zona próxima de las serranías turolenses, ha permitido inferir a algunos autores, la concentración de la población en unos cuantos yacimientos de mayores dimensiones

La extensión excavada en Les Raboses es de unos 90 m². El potencial del yacimiento es grande y se estima que su superficie puede ser de 2500 m². El espacio disponible fue modificado mediante estructuras constructivas, sobre la base de cuatro muros de aterrazamiento, que crearían espacios utilizados para la construcción de habitaciones y zonas de paso o acceso. La plataforma superior del yacimiento fue ocupada por estructuras de habitación, que usan como pared la cara interna del primer muro de aterrazamiento. La zona más baja estaría constituida por una estructura maciza de planta trapezoidal, con una posible función de control o defensa. Los materiales empleados en la construcción son losas de rodeno local, bloques de caliza de la misma cima, tierras, arcillas y elementos vegetales de cubrición, que han quedado reflejados en las improntas. En algunos yacimientos próximos de la Edad del Bronce, como el Puntal de Cambra (Villar del Arzobispo), la Lloma de Betxí (Paterna), Muntanya Assolada (Alzira) o la Mola de Agres, se observa la presencia de importantes construcciones que requieren un ingente esfuerzo colectivo, por lo que se puede intuir la existencia de ciertos elementos jerárquicos que articulen estos esfuerzos.

viernes, 6 de agosto de 2021

Yacimiento arqueológico de Covalta - Albaida


El Yacimiento arqueológico de Covalta cuya época corresponde al ibérico antiguo y pleno, se localizada en el  término municipal de Albaida (Provincia de Valencia, España), en la sierra de Benicadell que separa el valle de Albaida de la valleta de Agres, ocupando la porción más alta de la meseta.

La planta del poblado que han puesto de manifiesto las excavaciones se sitúa en la parte septentrional. No se advierte un plano urbanizado y las habitaciones se disponen sin orden aparente. La muralla tiene 3 metros de espesor.

Se han obtenido materiales que consisten en cerámica ática de figuras rojas (s. IV a. C.), y de barniz negro, cerámica ibérica con decoración geométrica, fíbulas, y una laminilla de plomo de 34 x 40 mm en escritura ibérica suroriental.

miércoles, 4 de agosto de 2021

Yacimiento arqueológico de Cerro Boyero


Los principales valores arqueológicos del yacimiento se centran en los restos de una ciudad ibérica fortificada, de más de 17 hectáreas y estratégicamente asentada en una meseta con buenas condiciones de habitabilidad y defensa, amplio control visual del territorio y manantiales y terrenos aptos para el cultivo en sus inmediaciones. El recinto original fue ampliado hacia el este en época iberorromana, como atestigua la existencia de cisternas y silos datados en ese periodo.

Cerro Boyero fue dado a conocer en el año 2002, a raíz del hallazgo casual de un relieve antropomorfo ibérico y parte de una inscripción en piedra en un lugar cercano a la zona fortificada. La primera de estas piezas conserva la mitad del rostro de un hombre con barba y pudo pertenecer a la fachada de un edificio. La inscripción se sitúa en un bloque de forma trapezoidal y en ella se aprecian dos líneas de escritura con seis signos identificables y tres incompletos. El régimen de protección acordado incluye ambos bienes inmuebles, que actualmente se exponen en el Museo Municipal y Centro de Interpretación del Territorio de la cercana población de Alcalá la Real (Jaén).

Los materiales en superficie del yacimiento revelan una ocupación humana continuada durante el Bronce Final Reciente (cerámica pintada a bandas con motivos geométricos de policromía roja y negra), la Edad del Hierro Antiguo (molinos de mano y otras piezas de moler), la época ibérica (otras cerámicas con decoración geométrica), la ocupación romana (abundantes vestigios cerámicos y restos de ánforas y conducciones de agua) y la Edad Media (cerámica vidriada).

De la muralla ibera se conservan algunos restos emergentes, sobre todo en el flanco norte, donde se aprecia una construcción en talud a base de piezas pequeñas. En otros sectores existían lienzos de grandes sillares, aunque la acumulación de grandes montones de piedras para facilitar las tareas agrícolas impide reconocerlos.

Otros indicios apuntan a que la necrópolis del poblado podría situarse en la zona de El Barranco, prolongación natural de Cerro Boyero, donde también existen abundantes restos de cerámica ibérica y romana.

Junta de Andalucía 

domingo, 1 de agosto de 2021

Yacimiento de El Puntal - Salinas


El yacimiento arqueológico de El Puntal, cuya época corresponde al ibérico pleno (siglos V-IV a. C.), está situado en el término municipal de Salinas (Alicante, España), en un espolón de la sierra Altos de don Pedro, a 3,5 km del núcleo urbano, frente a la laguna de Salinas. Fue descubierto oficialmente por José María Soler García, en agosto de 1952.

La erosión del terreno y las acciones clandestinas, han castigado notablemente el lugar, con abandono de materiales. En la actualidad el yacimiento está cubierto de vegetación.

Existen restos de estructuras defensivas, como una línea de muralla, restos de torres y de un torreón trapezoidal y un foso (plano). La estructura defensiva presenta paralelismos con la observada en la Bastida de les Alcuses, poblado con el que El Puntal mantendría vínculos. También se observan restos de viviendas de planta cuadrada o rectangular. Se excavó además, la necrópolis con ajuares de tipo aristocrático.

Entre los materiales destacan vasijas de lujo importadas de origen ático (barniz negro y figuras rojas), del siglo IV a. C., indicativas de un activo comercio exterior, un ánfora púnica ebusitana, e ibéricas, cerámicas ibéricas pintadas (bandas y círculos), especialmente urnas, lebes y platos, cerámicas grises y de cocina, así como recipientes tipo cantimploras y decantadores. Se han identificado, además, pesas de telar (pondera), fusayolas, restos de armas de hierro como cuchillos (tumba 33) y puntas de lanza (tumba 29-30), manillas de escudo, útiles agrícolas, fíbulas anulares de bronce, y otros materiales.