Lo más destacado de la visita es: La belleza de Pequeñas Maravillas, las descomunales dimensiones de la Gran Rotonda (50.000 m3), la interminable longitud y altura de Gran Vía o las oscuras y profundas simas de Columna Solitaria, van fijándose en nuestra retina hasta desenfocarse finalmente en la sala Maravillas. Todo ello a través de cómodos caminos, puentes y escaleras, y con una iluminación artística con mas de 2.000 puntos de luz.
En épocas de lluvias o deshielo, el río penetra atronador en la cavidad formando cascadas y rápidos que nos acompañan por las primeras salas visitables hasta perderse en un impresionante salto hacia las profundidades de la sala de Hadas. Por este motivo la primavera y el otoño son las mejores épocas de visita
El segundo nivel de la gruta es también apto para visitas de espeleología y de aventura el llamado Curso de Aguas, que durante unos 2 Km. atraviesa la montaña hasta las espectaculares Hoces de Vegacervera. Otro de los puntos de interés a visitar, por el que pasaremos al ir hacia la cueva en coche, se trata de un largo desfiladero por el que el río va serpenteando encajonado entre paredes de más de cien metros de altura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario